Un ejercicio retrospectivo para un área general es un método estructurado para reflexionar sobre eventos, proyectos o períodos pasados, identificando lo que salió bien, lo que no funcionó y cómo mejorar en el futuro. Este proceso involucra revisar acciones y resultados, como éxitos (cumplimiento de plazos), desafíos (problemas de comunicación) y lecciones aprendidas (necesidad de una mejor planificación), todo en un entorno colaborativo. Se utiliza para evaluar el rendimiento, descubrir insights y fomentar la mejora continua sin señalar culpables.
El beneficio clave es el aprendizaje y la adaptabilidad mejorados del equipo, lo que conduce a procesos más efectivos y mejores resultados en futuros esfuerzos.